Ficha de Harumi

Mei es una niña serena, demasiado para algunas personas. Ella se dedica a observar lo que la rodea con extrema curiosidad, esta habilidad le ha permitido destacar por la apreciación de pequeños detalles que la gran mayoría no suele notar. Basa sus decisiones en las probabilidades, los números para ella constituyen un argumento fundamental. Es callada por lo que suele pasar desapercibida entre un grupo numeroso, sin embargo no le gusta que la ignoren y mucho menos cuando tiene algo que decir.
A pesar de su seriedad, es una niña extremadamente dulce. Su forma de hablar, caminar y sonreír lo demuestran de forma constante. Su mirada expresiva grita los sentimientos que sus labios no pueden decir. Ganarse su confianza es bastante difícil, sin embargo cuando la consigues ganas una aliada, quizá no muy fuerte; pero no dudes que te cuidará la espalda si debe hacerlo.
Su timidez suele causar problemas a la hora de trabajar en equipos numerosos, por lo que generalmente está sola, cosa que no le agrada del todo. Le gusta el silencio y mirar las nubes con aire soñador.
Sin embargo, sigue siendo una niña, le gustan los juegos y las risas. Correr hasta que su cuerpo no pueda más es una de sus formas de jugar, siente que la libertad se apodera de ella. Se entretiene observando las flores y los animales que son inofensivos para ella.

Mei es una niña pequeña, mide 1,40 mts y pesa no mas de 35 kg. Es de complexión delgada pero atlética, ser una enana hiperactiva cuando era aún más joven tiene sus beneficios. Su piel es nívea y suave, parece una verdadera muñeca de porcelana. De facciones delicadas e infantiles que destacan la inocencia y dulzura de Mei. Dueña de ojos color rojo, expresivos y llenos de curiosidad por el nuevo mundo que la rodea. Su cabello es largo, lacio y de color rubio platinado que usualmente lleva suelto.

Mei no sabe donde ni cuando nació, tampoco lo saben sus padres adoptivos. Lo único que ella sabe, es que fue abandonada a los pocos dias de nacida a las afueras de un orfanato en Tokio. No había nombre, ni carta de despedida, ni ninguna de esas cursilerías...por lo que las mujeres del orfanato escogieron el nombre "Mei". No se podía decir que era una niña normal, su timidez le impedía jugar con otros niños de su edad, prefería pasar su tiempo junto a las demás mujeres en la cocina o lo más apartada de otros infantes. En aquel lugar la criaron hasta que cumplió los 5 años desde que las cuidadoras del orfanato la encontraron. En ese momento la familia Nishihara apareció y tomaron la decición de adoptar a la pequeña. La pareja quería adoptar una niña ya que después del nacimiento de su hijo mayor no pudieron concebir más hijos, sin embargo ellos querían tener una hija en casa.
En el momento en que Mei colocó un pie en la casa de los Nishihara supo que aquel lugar era su hogar, no había nada que la hiciera más feliz. Ryusei, su hermano mayor, era lejos la persona a la que ella más quiere; ambos tuvieron desde el primer momento una conexión muy fuerte a pesar de la diferencia de edades (en aquel entonces Ryusei tenía 13 años).
Su vida desde entonces fue perfectamente normal, asistió a la misma primaria que su hermano destacando por sus buenas calificaciones. Sin embargo su personalidad todavía no le permitía hacer muchos amigos, por lo que pasaba muchas horas del día leyendo libros, observando a las personas y objetos. Era por mucho la niña más curiosa que había pasado por esa escuela, según la mayoría de los profesores.
La admiración que sentía por su hermano era tremenda, le gustaba todo lo que él hacía. Jugaban juntos todo tipo de juegos, pero hubo un momento en el que Ryusei comenzó a jugar video juegos más especializados en los cuales Mei no podía participar. Su hermano hablaba sobre un juego llamado Sword Art Online, y la verdad era que la curiosidad le estaba comenzando a molestar.
Un día Mei estaba sola en casa, sus padres estaban trabajando y su hermano aún no volvía de su trabajo de medio tiempo. Había escuchado que su hermano se había estado preparando para jugar SAO, ya que el juego le había llegado esa mañana. Mei fue derrotada por la curiosidad, así que tomó el NerveGear, se lo puso en la cabeza y lo encendió. Desde ese momento está atrapada en SAO sin posibilidades de salir.

*Algunos de sus hobbies son la lectura, el atletismo, la cocina.
*Le gustan los animales y los video juegos
*Solía pasar horas jugando con su hermano
*Quiere regresar a casa, pero no tiene la fuerza ni habilidad para hacerlo