Serika Williams

Serika es bastante diferente de como era antes, pues la difícil relación que está viviendo la ha obligado a madurar. Pese que le sigue dando una importancia al físico y a verse bien, ya no lo considera algo indispensable en el día a día ni tampoco alardea de ello. Tiene una evidente confianza en si misma, tanto física como psicológicamente, pero a perdido un poco (no toda) de esa arrogancia que la convertía en una chica mimada e insoportable para muchos. Ha aprendido a colaborar y trabajar en equipo (o, mejor dicho, se ha visto obligada a ello) para seguir avanzando en su vida, algo que en el pasado habría sido inconcebible. Aunque colabora, no ha perdido ese toque independiente tan personal. No le gusta depender de la gente, aun sabiendo que actualmente no es capaz de valerse por si misma totalmente sola. Le cuesta admitir ciertas de sus limitaciones, de forma que en algunas ocasiones reaccionará de forma algo agresiva verbalmente si considera que se le falta al respeto.

Se ha convertido en una mujer muy sincera, sea cual sea la reacción de la persona que pregunte, pues no soporta las mentiras y engaños por culpa de malas experiencias del pasado. Pese que es fácil hablar con ella, le cuesta confiar totalmente en las personas que acaba de conocer. La gente deberá ser paciente con ella, pues que te revele secretos o que cree un vínculo muy estrecho necesita su tiempo y dedicación. Algunas personas la tachan de dura y no se equivocan, Serika ya no permite que la gente la manipule y toma sus propias decisiones. A veces su forma de hablar le resulta poco amigable a la gente, pero poco a poco se descubre que la mayoría es una fachada.

En realidad, Serika tiene ciertos miedos y frustraciones. Aun así, prefiere morder su lengua y contener sus miedos para no convertirse en una carga o contagiar cierto pesimismo en sus compañeros. Lucha para salir de allí, pero también por todos aquellos que se han ganado un hueco en sus pensamientos o corazón. Obviamente, como todo ser humano, tiene sus momentos de debilidad donde necesita sentirse apoyada y que no está sola. En esas ocasiones tan solo acudirá aquellos en los que más confíe, casi como si fuese un secreto inconfesable.

En el amor es una mujer a la que le gustan las atenciones, pero su nueva madurez le impide estar prácticamente todo el día con aquella persona a la que quiere. Ahora disfruta de su independencia y piensa más en si misma, y no pretende que eso cambie. No es capaz de admitir que hace tiempo que dejó de querer a su pareja en la vida real, por lo que niega rotundamente posibles atracciones y demás sentimientos hacia otras personas. Es una mujer complicada de conquistar, ya que normalmente solía ser ella quien hacía esas cosas.

Serika es una joven atractiva de aproximadamente 1,72. Tiene el cuerpo delgado y atlético, pues desde hace bastantes años visitaba el gimnasio un par de veces por semana. Es esbelta de piernas largas y brazos finos. Muñecas menudas, espalda estrecha y caderas torneadas con suavidad. Tiene un busto notorio, aunque muchas son las veces que ese detalle no puede apreciarse por culpa de la ropa que lleva. De tez clara, algo delicada a los rayos del sol, sin llegar a ser demasiado pálida o de aspecto enfermizo.
Su rostro es ovalado con la barbilla ligeramente marcada y los pómulos suaves. Los labios son algo pequeños, pero carnosos, siempre de un toque rosado natural. Nariz recta, de esas que apenas se notan. Sus ojos son grandes y expresivos, de un color rojizo bastante poco habitual en nadie. Suelen ser el mejor espejo de como se siente, ya que tiende a negar bastantes de sus emociones. Por mucho que mienta, dirán la verdad por ella. Las cejas son finas y perfiladas, detalle que siempre ha cuidado mucho para acompañar a la expresión y forma de su rostro. Destaca la larga melena pelirroja que posee. Con el flequillo hacia un lado, la mayoría de las veces cubriendo su ojo izquierdo, cae hasta llegar a su cintura con suaves bucles y ondulaciones.

No tiene un gusto particular por la ropa o alguna exigencia concreta, sobretodo desde que entró en Sword Art Online. Su única manía es que le siente bien, ya que le gusta estar cómoda con aquello que lleve.

Serika siempre tuvo una vida bastante común. Nació en el seno de una familia de clase media-trabajadora, convirtiéndose en la última y única hija de cuatro hermanos. Siempre fue algo consentida y sobreprotegida en ese sentido, más no era algo que sobrepasase los límites de una relación corriente entre hermanos. Puede que creciese demasiado rápido por culpa de la diferencia de edad que se llevaba con ellos, adoptando muchas veces un vocabulario impropio. ¿Que importaba? Mientras era pequeña, resultaba incluso gracioso que dijese determinadas palabras. Pero la niña empezó a crecer día tras día y su mentalidad, que buscaba la aprovación de los demás con inocencia, empezó a cambiar ligeramente.

Serika se convirtió en la habitual chica de instituto que valora más el aspecto físico que el interior. Más preocupada por su popularidad que por sus notas, siempre estaba rodeada de personas que creía que eran sus amigos. Nunca se aburría, cada día encontraba algo interesante que hacer para escabullirse de las clases y dejarse ver por sitios poco adecuados para su edad. ¡Cuantas veces fueron las que peleó con sus padres o sus hermanos la sacaron a rastras de algún sitio! Ni siquiera podía contarlas con los dedos de sus manos. El mundo no la comprendía, de eso estaba segura, y así solo hacía que aumentar sus ganas de ser independiente.
¿Pero como era posible que ella, la cual todos creían que terminaría con el típico “chico malo”, empezase a mantener una relación estable con la persona que pasaba más desapercibida? Él era solitario, apenas se relacionaba con nadie y prefería encerrarse en su cuarto jugando a videojuegos antes que salir a la calla. En definitiva, todo lo opuesto a ella. Quizá por eso llamó la atención de la joven y decidió que debía ser “suyo”. Al principio fue extraño y le costó adaptarse a las aficiones que creía que eran infantiles y aburridas, pero poco a poco la costumbre se apoderó de ella. Cada vez era menos extraño tener que pasar la tarde en su dormitorio, tirada sobre su cama observando alguna revista mientras él jugaba a cualquier cosa. La única forma con la que lograba que sus ojos se apartasen de la pantalla era empleando todas sus armas de mujer.

De esa forma, el tiempo pasaba lentamente, y Serika empezó a plantearse que hacía con alguien así. Lo que había sido respeto por sus aficiones, empezó a convertirse en un problema y motivo de discusión constante. Ya no era extraño ver como se marchaba de su casa dando un portazo para intentar llamar su atención. Cada vez pasaba menos tiempo en su casa y la idea de visitarlo se volvía poco a poco más aburrida y obligada. ¿Que si le quería? Hubiese asegurado que si.
Un día, totalmente hastiada de la situación, llegó a su casa para hablar, por enésima vez, del tema por el cual siempre peleaban. ¡Menuda sorpresa la suya al ver que no había cambiado ni un ápice su forma de pensar, sino que encima había comprado un nuevo juego! Sword Art Online, ese que estaba causando tanto revuelo y que al parecer había tenido tanto éxito de vendas. Si, volvieron a discutir más fuerte que nunca, pero por algún motivo extraño Serika se dejó convencer por su pareja y probó el juego. Quizá, si lo veía con sus propios ojos, comprendería porque no recibía todas las atenciones que creía merecer. Se volvió a tumbar en su cama por última vez y dejó que ese nuevo mundo la capturase por completo. ¿Quien le iba a decir que no podría volver a salir de allí?

Virtudes:

* Es una mujer extrovertida, sin tabús y de sinceridad absoluta.
* Tiene un carácter fuerte que no le permite doblegarse ante nadie, pese que tiene bastantes inseguridades.
* Es muy fiel a sus amigos y se preocupa por ellos.
* No es avariciosa con los ítem, ni tampoco tiene un sentido tan competitivo como otros jugadores, pero eso no significa que no quiera volverse más fuerte.

Defectos:

* Es algo tozuda, le cuesta entender algunas cosas y aceptarlas así como así.
* Tiende a creerse más de lo que es.
* No es una buena líder, pese que pueda creer que si. Necesita alguien que la guíe y le recuerde que cosas no debe hacer.
* Suele preocuparse demasiado por ciertas cosas, sobretodo si son peligrosas.
* Normalmente está tensa en los combates.

Odios:

* Los chicos que no la toman enserio.
* Que le den ordenes, las cuales le parecerá que nunca han sido pronunciadas con suficiente educación.
* Sword Art Online y todos los juegos parecidos, a los que culpa por la extraña relación que ha tenido con su pareja.

Miedos:

* A la muerte, evidentemente.
* La picadura de avispa.
* A quedarse atrás.
* Los insectos.

Manías:

* Solo suele mostrarse realmente relajada en los puntos seguros o cuando está rodeada de gente.
* Maldecir mascullando.
* Tocarse el pelo.