Misión 1.3. ¡Exterminio de Jabalíes! [Rol]

Tras recibir un golpe del jabalí que acababa de atacar, se percató que ambos compañeros se pusieron espalda con el espalda con el fin de poder luchar sin tener que estar preocupándose por cuidarse la retaguardia. Era algo ingenioso y que sin duda ayudaría mucho, por lo que el joven castaño no se quiso quedar y decidió arremeter contra el jabalí que había atacado antes con el fin de terminar el trabajo, después de todo era su presa.

Su ataque fue algo más precavido que el anterior, ya que esta vez extendió su brazo casi en su totalidad y lo que hizo fue dar un pequeño salto hacia adelante para dar una estocada y luego retirarse rápidamente mirando que no se acercará ningún animal demasiado rápido como para que no le de tiempo a reaccionar. Tras el ataque dio un par de saltos hacia atrás asegurándose que detrás de el no había ningún jabalí y los de delante suyo no estaban muy cerca. Esperaba no ser dañado de nuevo....

- Vamos - dijo a voz en cuello

OFF:

Tras la estocada que le había propiciado al jabalí, este cayó muerto finalmente tras la serie de tres ataque de la cual había sido víctima. Aparte de la satisfacción de saber que ya había uno menos en el campo de batalla, el joven Hei tuvo una idea de como hacer frente a estos animales; como se diría de manera coloquial, ¨se le había prendido el foco¨.

- Vamos - gritó mientras se mantenía en guardia y lejos de cualquier animal con pequeños movimientos de pies

Estaba a unos 6 metros de donde estaban sus amigos, uno permanecía en el suelo haciéndose el muerto, eso tal vez hubiera funcionado si se tratara de la vida real, pero en Aincrad, todos los players tenían una barra de vida sobre la cabeza y la que suponía que los rivales también podían ver. Por otro lado, el pelirojo simplemente se había alejado un poco como para toar algo de aire tras los ataques que habían sido algo duros, ya que eso se podía ver en su barra de vida.

- Escuchen - dijo a voz en cuello para que lo escuchen claro - Tenemos que atacar los 3 a un mismo objetivo de manera consecutiva, tres golpes es un promedio de lo que duran de pie - volvió a decir fuertemente - Mientras uno ataca los otros lo cubren, si se acercan muchos nos retiramos un poco

Dicho esto simplemente aguardo la respuesta de sus compañeros mientras se alejaba quizás a unos 8 metros de ellos y a unos 6 del jabalí más cercano. Hecho esto comenzó a gritar y blandir su espada (aunque no demasiado ya que no quería perder la postura de defensa) para llamar la atención de los animales y darles algo de tiempo de levantarse