Misión 1.5 ¡Exterminio de Jabalíes!

Luego de haber atacado las piernas del Dux creía que no tendría tiempo para alejarme, pero me equivocaba garrafalmente ya que en ese momento Oga había realizado dos ataques que fueron suficientemente fuertes como para dejar al Dux convertido en nada más que datos. Miré a Oga con sorpresa, fascinación y alegría todo mezclado. Quería saltar de felicidad luego de la derrota del Dux, no podía estar más contenta; sabía que no era tiempo para celebrar todavía debido a que faltaban unos cuantos jabalís todavía, pero era inevitable no sentirme contenta. Ciertamente las habilidades de Oga no dejaban de sorprenderme, estando a su lado lo hacía ver mucho más fácil matar jabalíes de lo que era.

Pude oír un leve chillido desde donde se encontraba Black, parecía que él no tenía problemas con los animales que lo estaban atacando hacía unos minutos. Me alegraba saber que sus ataques estuvieran dando frutos con la cacería de jabalís. Una sonrisa apareció en mi rostro, tenía la impresión de que las cosas iban a mejorar ahora, cuando me refería a mejorar era a que no tendríamos que complicarnos tanto con aquellas criaturas.

Sentí un golpe en mi pierna, no fue tan doloroso como los otros golpes que había recibido, sin embargo fue lo suficientemente fuerte como para hacerme perder el equilibrio y caer al suelo. Mi espada cayó a unos cuatro metros de distancia, miré al jabalí 9 el cual parecía dispuesto a atacarme ante el más mínimo movimiento. De un salto agarré mi espada, pocos instantes antes el animal había empezado su carrera para embestirme. “Diablos” pensé mientras corría en su dirección en zigzag como lo había hecho Black antes, el animal parecía haberse confundido un poco…quería aprovecharme de ello. El jabalí 9 creyó que iba a correr hacia la izquierda, aquel error hizo que pudiera atacarlo por la izquierda haciéndole un corte a lo largo de su costado izquierdo. Pocos instantes después me giré rápidamente y enterré mi espalda en su lomo con fuerza. Las ganas de seguir luchando no me faltaban, sentía la adrenalina correr por mis venas, no me importaba que aquella sensación fuera falsa...el solo sentirla me daban las fuerzas necesarias para continuar.